Tras comprar un vehículo, uno de nuestros clientes comprobó que su estado real era mucho peor al prometido cuando lo compró. Acudió a nosotros y conseguimos demostrar la existencia de vicios ocultos mediante un preciso y detallado informe pericial acreditativo de que el cuentakilómetros fue manipulado para aparentar tener menos kilómetros y un desgaste menor del que realmente tenia y que origino fallos cuyo coste de reparación a nuestro cliente le supuso casi 5.000 euros que también conseguimos que recuperara. Como consecuencia, nuestro cliente recuperó tanto el dinero invertido en reparaciones como el precio pagado por el vehículo, además de todas las costas del procedimiento.
Le asesoraremos de forma cercana y eficiente. Podemos alcanzar una solución satisfactoria.